martes, 21 de febrero de 2006

Príncipe Valiente

Hace más de un mes que Myca y yo hicimos nuestra primera reseña mano a mano, así que ya es hora de dar continuidad a la experiencia. Esto es lo que nos viene a la cabeza tras haber leído los primeros números del Príncipe Valiente:


Si esto no es un cásico que baje Diso y lo vea…



Myca Vykos: Recuerdo haber leído algo de este personaje hace la tira, el suplemento "Gente Menuda" del ABC que traía mi padre los domingos. Eran 16 o 20 páginas, y cada hoja era de un personaje. Recuerdo que por allí pasaron Mortadelo, Superlópez, Spiderman, Conan... Y nunca fallaba el coñazo del Príncipe Valiente. Además, qué dibujos más horrorosos. Resultando, que era de las pocas hojas del Gente Menuda que ni leía ni coleccionaba. Ahora que lo pienso... qué moral. Para tener un puto tebeo de 22 páginas tenía que ir cortando hojitas durante... ¡11 semanas! ¡Casi tres meses! Cada álbum de Superlópez... ¡Unos seis meses! Argh, ahora no lo aguantaría... Pero hay que reconocer que sirvió para convertirme en un friki.

Y ahora Planeta va y saca el forro ese. En tapa dura, nada más y nada menos. Pero bueno, el primer tomo salía por dos míseros euros y scarvenger me lo había recomendado fervientemente. Venga, picaremos y santas pascuas. Y si no me gusta, seguro que a la gafapasta de Vampiresa le agrada.

Creo que esta serie ha sido la mayor sorpresa que me he llevado en muuuucho tiempo.

De la chapuza del dibujo que recordaba del Gente Menuda, nada. El dibujo es cojonudo. Quizás tenga un estilo un tanto anticuado, pero los lápices son increíbles, las tintas están dadas con una maestría inédita hoy en día y el color (aunque me suena haber leído que no es el original) es la bomba. Por lo visto, hay muchos materiales de reproducción de dudosa calidad, y quizás fuera ese el caso de mis recuerdos.

La historia... Iba a decir entretenida. Pero es algo más. Roza lo adictivo. Está ambientada en la Baja Edad Media, en tiempos y alrededores del Rey Arturo. Y, joder, da gusto leerla. Tiene amoríos caballerescos, reyes exiliados, combates contra bárbaros... Es que encima es un tebeo variado, coño. Empecé a leerlo el viernes a las 16:00, cuando me monté en el autobús camino a Burgos. Cuando llegué ya me lo había terminado, y al llegar a Viñetas me compré (aparte de los tebeos que tenía de importación) los tomos 2 y 3 a cuatro euros. Esta mañana me he leído la mitad del tomo 2... y me encanta. Está asegurada la compra hasta el tomo 5, y probablemente caiga la serie entera. Lo único que me echa para atrás es el precio. Va a salir a 8.95 cada tomo (sí, tapa dura y lo que quieras), pero es quincenal. 26 tomos, según me ha dicho hace un rato scarvenger. Eso supone que la serie entera saldrá por unos 200 euros.

Lo de siempre. ¿La recomiendo? Los primeros 5 tomos (que saldrán por unos 15 euros en total ), fervientemente. Es un tebeo cojonudo y sale muy bien de precio. A partir de ahí... ya depende de tu presupuesto.

Pero acabemos con una afirmación categórica. Tras leer el primer tomo, ya he comprendido por qué se considera Príncipe Valiente un clásico dentro de la historia del cómic.

scarvenger:

Esta es una serie a la que nunca habría dado la menor oportunidad. Que sí, que todos dicen que es un clásico y es imprescindible y tal, pero el protagonista se llama Valiente (me suena tan ridículo como si Superman se hubiese llamado “Tipo con Mallas Azules”) y lleva un corte de pelo que siendo benévolos se podría calificar de afeminado. Pero algo ocurrió. A raíz de la salida del primer número se montó un follón (yo lo leí en La Carcel de Papel) que me dejó alucinado. Un montón de gente de la que había pedido ansiosa este material, se quejaban ahora del color de la obra y decían que en esas condiciones de edición no se lo compraban!!!

Esto sí que me picó la curiosidad e hizo que en la tienda me pusiera a hojear el primer tomo a ver de qué iba el desaguisado. Y de desaguisado nada. Una reproducción del dibujo cojonuda y unos colores bien puestos que no molestan la lectura, y aunque el protagonista me seguía pareciendo un poco lila, a dos euros la primera entrega no me va a pasar nada por probar. Y señoras y señores, lo que me encuentro es una de las lecturas que más me ha enganchado. Fue empezar a leer y no poder parar hasta acabar el tomo. Qué cosa más ágil, y más variada, y más interesante, y entretenida, y… ¡qué bueno joder!

Un tebeo de aventuras grandioso, con escenas de acción que ya quisieran poder conseguir ahora en la mayoría de las películas que quieren arrasar las taquillas en verano. Con un romance tan medievalesco que te lleva a recorrer el mundo en su busca y pobre de ti como no lo termines encontrando. Con momentos de humor que hacen bajar a los personajes de la nube de heroicidad a la que se suben y que acabaría empalagando si no existiesen esos quirúrgicos respiros. ¡Qué manera tan maravillosa de manejar una narración!

Y encima sabe cómo dar un toque de verosimilitud al conjunto, y no sólo con su brutal dibujo, sino que al intercalar la acción con momentos clave en la Historia (de Gran Bretaña primero, de Europa después, y a saber hasta dónde nos va a ir llevando) consigue que te dé la impresión de estar asistiendo a la clase más divertida de tu vida. Con 70 años de retraso, pero me descubro ante usted Sr. Foster, esté dónde esté, gracias por su trabajo.

Y para acabar un dato curioso, ni bueno ni malo, que me gustaría comentar. Durante la lectura en muchas ocasiones me venían a la cabeza las películas del cine mudo. ¿Por qué? Pues porque no hay un solo bocadillo en todo el tomo. No sé si por aquella época ya se utilizaba este recurso en otros cómics para mostrar los diálogos entre personajes, pero por un momento se me ha ocurrido relacionar su aparición con la expansión del cine sonoro. Hasta ese punto llega mi desconocimiento sobre la Historia de la historieta, ¿alguien quiere arrojar un poco de luz?

13 comentarios:

eSeCeeRre dijo...

Los bocadillos ya se usaban más de treinta años antes de "El Príncipe Valiente". Sin ir más lejos en "Little Nemo in Slumberland" (1905)

scarvenger dijo...

Pues gracias por la aclaración. Otra teoría descabellada que se va al garete...

Uriondo dijo...

Creo que es una de las mejores obras de todos los tiempos... tengo toda la etapa de Foster y no decae casi nunca. Espectacular la historia del poblado de patricios romanos que siguen guardando la última muralla en Gran Bretaña contra toda racionalidad... Imprescindible

Vampi dijo...

Gafapasta?! GAFAPASTA YO??!!

mgarcia dijo...

Joder, que nadie tiene ni puta idea. Esta es una INDISCUTIBLE obra maestra del comic. Leo estupideces... que si el corte de pelo, que si el personaje es lila,... ¿de dónde habeis salido? Pues supongo que los comics modernos con la leche de los manga y de los superhéroes americanos. Hay que mamar la historia del comic como hay que mamar la historia del cine. Estamos ante una obra de finales de los 30 y principos de los 40 del siglo XX. Habría mucho que decir de la obra de Foster y del enorme artista gráfico que era. Cada una de sus viñetas es un cuadro lleno de detalles y de información. Cierto que resulta una Edad Media muy a los Hollywood de la época, lo que hoy le da un irresistible encanto.
Lectores de comics... investigad un poco la historieta de los años 40 y 50. Vais a descubrir un mundo nuevo.
Por cierto y para quien no lo sepa: Principe Valiente era una serie originalmente para publicar en prensa, con un maravilloso blanco y negro. He conocido verdaderas ediciones chapuceras en España y la que nos llega ahora de Planeta, a pesar de los colores, está pero que muy bien editada. Teniais que haber visto lo que había antes.
Aprovechad la oportunidad los que no conozcais la obra y lo dicho... buscad los clásicos. Nada mejor para el comic que esos blancos y negros soberbios de, por ejemplo, Spirit, Johnny Hazard, Mandrake, y etc, etc... hasta llegar a Hugo Pratt.

Myca Vykos dijo...

Oh, cielos, pérdoneme usted por no haber tenido contacto antes con esta obra.

¿Será capaz de ello, o debo suicidarme ya?

Jo, qué lástima damos los lectores de superhéroes. No merecemos vivir.

Aunque al menos sabemos escribir.
Nuestras construcciones gramaticales no dan asco.
Si va a entrar en nuestro blog a insultar, al menos hágalo con un lenguaje que no recuerde a un niño de cuatro años.

mgarcía dijo...

Siento haber dado la impresión de que mi comentario pudiera parecer un despropósito. Desde luego nada más lejos de mi intención. Lo que era, desde luego, un comentario repentino y apasionado ha resultado para Myca Vykos algo menos que un insulto.
Como mi comentario ha sido público, hago pública mi disculpa a Myca (si le parece necesaria) aún a pesar de haber recibido personalmente un correo suyo con el mismo texto que aquí ha insertado en respuesta al mio.
En cualquier caso no considero que yo haya insultado a nadie, repasado lo escrito ni encuentro el insulto ni que mi texto esté mal escrito o expresado. Tampoco considero para nada que el mio sea un lenguaje infantil ni que las construcciones gramaticales de mis frases den asco.
Lo primero porque ya hace demasiados años que aparecieron mis primeras canas y lo segundo porque el oficio de escribir no me es desconocido, si bien es cierto que jamás me dieron un premio por ello.
Conozco bien el mundo del cómic y mis colaboraciones en revistas y fanzines, o mis introducciones a los álbumes de autores españoles como Carlos Gimenez, Alfonso Font, Jose Mª Beá, y un largo etc.. no han sido pocas.
El hecho de que hoy alguien descubra la obra de Foster, y más la que aquí se comenta, me parece bastante positivo y el hecho de que alguien mantenga un blog para compartir sus descubrimientos es más que alentador.
En el encabezamiento de esta página Myca manifiesta "su desconocimiento de la historia del cómic" y solicita que alguien arroje sobre esto un poco de luz. Pues no era otra mi intención que atender un poco a lo solicitado y recomendar un buceo a fondo en el cómic de los 30 y 40, periodo en el que abundan verdaderas obras de arte. Creo que fué en los años 80 cuando la Editorial Toutain publicó en 4 tomos (bajo la dirección de J. Coma) una HISTORIA DE LOS COMICS bastante buena y en la que tuve oportunidad de colaborar. Encontrarla hoy será poco menos que imposible pero quizás en alguna biblioteca pública se pueda dar con ella. Recomiendo su lectura a cualquier interesado. Por arrojar luz, según se solicita.
En cuanto a los superhéroes, Myca, es algo más que cuestión de gusto. Claro que hay cosas buenas, pero se cuentan con los dedos de una mano. Y sin encima analizamos lo que social y politicamente transmiten (hablo en términos generales) habría mucho para escribir.
Un saludo.

Uriondo dijo...

Después de leer el comentario y la disculpa, albergo la sensación de que mi buen Mika se ha pasado un poquito. Pero es normal, la Librería es su niña. Es verdad que en el comentario había una pequeña falta, pero se la atribuyo a los duendes de la imprenta porque, en general, estaba bien argumentado.

Y aunque no me parecía esencialmente ofensivo, tal vez sí estaba un poco sembrado del típico desprecio de la generación "Los Profesionales" hacia el mundo de Rob!. Pero, en general, me ha parecido lo que dice en su disculpa, una ardiente defensa de lo que tanto él como yo consideramos como una de las mejores obras de todos los tiempos, no es tan grave.

En todo caso, me gustaría aclarar que a veces el enfoque de la Librería, en el que tratamos de dar un tono ágil a la cosa (especialmente porque muchas veces tenemos al jefe encima del hombro mientras lo hacemos), puede inducir a error. Y aunque hay reseñas largas, complejas, sosegadas y muy legibles, hay otras que, para qué vamos a engañarnos, no lo son tanto.

En todo caso, siempre intentamos ser accesibles y abiertos, con un enfoque muchas veces centrado en la "experiencia de lectura". Además, quienes las escriben no adoptan un enfoque elitista ni se documentan exhaustivamente para aparentar más de lo que son.
En mi defensa, puedo afirmar con orgullo que mamé en casa de mi tío toda la Historia de los Cómics de Toutain, y que él me enseñó a apreciar el cómic que nos intenta vender este señor. Afortunadamente, Planeta ahora está empeñada en hacer lo mismo (y con magníficos resultados).

En cuanto al cómic actual, insisto en una idea que ya barrunté el otro día: vivimos tiempos dorados. Es cierto que tal vez no se repita un fenómeno como Foster, y que quizá no tenemos suelto por ahí ningún Blasco, ningún Toppi o ningún Moebius (ni siquiera el propio Moebius). Pero sí tenemos un Guarnido, un Acuña o un Pulido que están batiéndose el cobre en Francia o los States y que terminarán por hacer cosas al menos tan buenas (si no mejores) con el tiempo. Yo adoro a Font, entrevisté en la universidad a Giménez, hubiera matado por conocer a Víctor de la Fuente, hubiera querido escuchar en vivo las historias de Tony Tano y tomarme cubatas en Sitges, le hubiera prestado dinero a Vázquez y amo la historieta.

En cuanto a calificaciones profesionales, si vamos a entrar a ver quién la tiene más larga, soy periodista, escribo en un periódico de tirada nacional (aunque sea económico), me gusta Hugo Pratt y, qué cojones, escribo en La Librería porque me parece el mejor sitio donde alguien puede hacerlo por diversión. Además, estoy tan orgulloso de mis compañeros de Librería (cuyas calificaciones profesionales y humanas enmudecerían a cualquiera) como alguien pueda estarlo de sus hermanos. Y si a alguien le parece más trivial de lo necesario, que se mire cualquier fanzine de la época del Madriz quitándose la película de nostalgia de las retinas.

Y, ¿por qué no decirlo? Olé nuestros huevos.

J Calduch dijo...

La Historia de los Comics volvió a distribuirse por sorpresa hace unos tres años, de forma que igual es posible rescatarla por librerías. Yo conseguí hasta las tapas.

J Calduch dijo...

Scarvenger: sí había bocadillos por entonces. Es un tebeo de 1937-1938. EN 1938 empezó Superman, y en los Archives hay bocadillos :-D

La Librería » Espiral dijo...

[...] Pero he de reconocer que a lo largo de estos últimos dos años han ido apareciendo en mi vida unos ciertos estímulos externos que están intentando abrirme los ojos. Desde hace más de ocho años está ahí Vampiresa, intentando que lea obras varias de cómic europeo, con mayor (Pascual Ferry y Miguelanxo Prado) o menor (cualquier cosa del –para mí– sobrevalorado Marini) éxito. También, las fervientes recomendaciones de gafapastas ilustres como Álvaro Pons me han hecho acercarme a obras que en otras ocasiones no habría mirado ni jarto de grifa. Léase Príncipe Valiente, por ejemplo. [...]

Mariano Bayona Estradera dijo...

Pues yo creo que Prince Valiant de Harold Foster, es lo mejor que hay en el
Noveno Arte considerándolo en su globalidad y únicamente la producción de
Harold Foster (1937-1971) ya que su continuador John Cullen Murphy estaba
muy por debajo del maestro. Creado para página dominical siempre fue pensado
para color, aunque por motivos económicos se hayan publicado a veces en blanco
y negro y también tiene su encanto debido a la tan alta calidad artística del dibujo.
Quienes han calificado de estático el dibujo de Foster, es porque no han visto las
ediciones apropiadas. Ahora acaba de salir una al mercado, traducida de la
original portuguesa de Manuel Caldas que es sin duda, a pesar de la ausencia de
color, la mejor edición española y donde, al no haber pérdida de ningún trazo,
se puede apreciar mejor el movimiento.

No tiene sentido comparar géneros en el mundo del Noveno Arte. Superman salió
en 1938, un año más tarde que Prince Valiant, con dibujos muy toscos y continúa
publicándose con múltiples dibujantes algunos excelentes y Prince Valiant sigue
igualmente publicándose desangelado y pálido al lado del original de Foster.

Eso no quiere decir que haya, como en el cine, obras maestras, las menos,
entre mucha obra menor, incluso basura artística. Pero como en el cine, depende
de la cámara que proyecte la película, de lo bien conservada que esté la copia
(paralelismo con las distintas formas de publicar un comic). Y luego está el factor
de los gustos personales de cada individuo y allí ya entramos en un tipo de
variable que es tan amplia que se hace muy difícil catalogar para gusto de todos.

Pero lo que está fuera de dudas es la calidad y el mérito en toda la obra de Prince
Valiant de Foster, maestro de maestros, inspiración de cualquier buen dibujante,
y solaz y entretenimiento para todo aquel que le guste la naturaleza y las aventu-
ras y el drama, la comedia y la tragedia. A través de la vida de Val se hace un
viaje por una Europa imaginaria y también por el nuevo continente, pero creo que
nadie ha logrado en un comic que se puede notar la brisa del mar mirando sus
viñetas, que se pueda oír el sonido del viento, el murmullo de las hojas en el
bosque, el sonido de las olas o el de los pequeños rápidos en los ríos, que
puedes ver lo que piensan los personajes mirando sus caras y que puedas sentir
perfectamente el paso del tiempo en la historia que Foster cuenta con deleite
personal.

Rigel dijo...

El cómic Flash Gordon de Alex Raymon, anterior a Príncipe Valiente, ya utilizaba bocadillos. Los bocadillos (balloons en inglés) ya eran muy habituales en esa época.
Príncipe Valiente está ambientada en la Alta Edad Media, no en la baja, en el siglo V se supone, lo que ocurre es que mete diferentes sucesos históricos que no están bien insertados en la realidad histórica. Ejemplo, mete en el mismo periodo histórico la caída del Imperio Romano, la llegada de San Patricio a Irlanda o la invasión árabe de Palestina. Pero claro, el cómic es un vehiculo de entretenimiento y no un texto histórico riguroso (el que quiera aprender que vaya a una biblioteca, jeje).
El vestuario y las armas si recuerdan la Alta Edad Media, pero así se representaban las historias del Rey Arturo en la literatura arturica (caballeros con armaduras, torneos y esas cosas). Y no es que copie el cómic una estética “Hollywociense” sino que en los libros de caballería de la época (siglo XIII-XIV), eran como aparecen en la historieta. Hollywood copiaría en este caso, de hecho en 1954 se hizo en los USA una versión cinematográfica del cómic, bastante mala por cierto, a Foster no le gustó nada. También hay una versión más reciente, de 1997.